Por Jorge Gómez
Los medios de comunicación en nuestro país cada cuatro años ponen su atención en los Juegos Olímpicos y se acuerdan de que no sólo de futbol… vive el mexicano.
Las grandes empresas televisivas, diarios, empresas radiofónicas, voltean sistemáticamente cada cuatro años a deportes ¨menores¨ y aparecen las historias, algunas estremecedoras, de atletas que luchan en su día a día por su mejor resultado, en un símil al que millones de mexicanos lo hacen desde su lugar de trabajo.
Deportes como los clavados, taekwondo y en ocasiones algún atleta de largo alcance, son tomados en cuenta por las grandes empresas de comunicación, o a nivel regional o estatal, en cada ciclo olímpico, pero al finalizar los Juegos Olímpicos de nuevo caen en el olvido y el aficionado vuelve a ser bombardeado por la información de futbol profesional, selecciones mexicanas de futbol, boxeo profesional y en menor medida el beisbol y baloncesto, -este último enfocado en la NBA-.
Los mismos periodistas que se preguntan el por qué eExisten directivos a nivel de Federaciones Nacionales o Asociaciones Estatales, que están enquistados durante más de 10, 15 ó 20 años en asociaciones civiles, bajo su dominio, se olvidan de los temas de promoción, organización, planeación y dirección en el deporte en cuanto pasa el furor de unos Juegos Olímpicos.
Ricardo Contreras en la Federación de Boxeo, Alonso Pérez en la Federación de Beisbol, el embrollo de la Federación Mexicana de Baloncesto, copada por Jorge Toussiant, son ejemplos de directivos que se enquistan en una Federación deportiva y desde donde se sirvan del deporte, entorpeciendo el desarrollo del deporte asociado en México.
Más que cuestionar a los directivos del deporte nacional, Bernardo de la Garza en la CONADE, Alonso Pérez en la CODEME y Felipe Muñoz en el Comité Olímpico Mexicano, sobre el número de medallas que los atletas mexicanos lograrán en Londres 2012, la prensa debería de cuestionar al Sistema Nacional del Deporte, que no ha podido implementar políticas en el ámbito deportivo, en la recreación y la Educación Física para los niños, jóvenes y adultos en todo México.
Los informes son alarmantes y cada semana surgen estudios, estadísticas y opiniones de expertos en salud de que la obesidad se está apoderando de los mexicanos.
Hace unos cinco años, el director del INDE, Saúl Castro Verdugo, durante una entrevista dijo que no existía el Sistema Nacional del Deporte (SINADE), dijo que era una farsa, ¨ ese SINADE es sin nada, no existe, las reuniones son una pérdida de tiempo, no llegamos a nada¨, realmente estaba molesto.
El peligro está ya a la vuelta de la esquina y la salud de millones de mexicanos está en juego por la falta de capacidad, indolencia y visión de políticos, incluidos los directivos de asociaciones deportivas civiles, las que realmente toman las decisiones de la promoción deportiva y donde poco pueden hacer los tres niveles de gobierno, bajo el actual esquema donde las asociaciones civiles, la mayoría dirigida por directivos sin preparación y que son a la vez entrenadores, padres de familia de algún atleta, dueños de gimnasios o equipos, cuando no deberían de tener un interés personal.