México concluyó su participación en el Hong Kong 7’s con tres derrotas que, a pesar de ser dolorosas, dejaron mucha enseñanza y experiencia en la joven escuadra que defendió los colores patrios en la fecha más mediática del HSBC Sevens World Series.
Las Serpientes formaron parte del grupo G donde compartieron honores con Zimbabwe, Rusia y las Islas Cook, tres equipos que tienen participación periódica dentro del circuito mundial y que cuentan con jugadores de gran calidad en sus filas.
México tuvo la oportunidad de jugar el primer partido del torneo frente a Zimbabwe, equipo que el año pasado se quedó a un paso de calificar al circuito mundial que actualmente se desarrolla. A pesar de ello, las Serpientes iniciaron el partido de manera intensa siendo agresivos en defensa; sin embargo, la calidad de los africanos era notoria y terminaron por hacer valer su experiencia al imponerse 27 – 0. La escuadra nacional tuvo una oportunidad de try al final del partido, pero una desafortunada jugada impidió que se fueran con números en la pizarra.
En el segundo día de competencia, las Serpientes se enfrentaron a Rusia, quienes en junio de este año serán anfitriones del campeonato mundial de Rugby 7’s. Los rusos, un equipo ordenado y muy físico derrotaron a México con un puntaje de 31 – 5. A pesar del abultado marcador, México logró tocar la zona de try en una gran jugada de Christian Henning.
El tercer partido de las Serpientes se jugó frente a las Islas Cook, un equipo que a pesar de venir de un país muy pequeño, cuenta con jugadores de gran calidad en sus filas. México inició en gran forma el partido, anotando el primer try por conducto de Pascal Nadaud, pero las Islas Cook respondieron de inmediato al empatar el marcador. Una vez más México se fue al frente con un try de Christian Henning y de inmediato los isleños respondieron con otro try cuya conversión fue exitosa, yéndose así al medio tiempo con la victoria parcial 12 – 10. Para la segunda mitad el factor físico comenzó a hacer de las suyas y los mexicanos se vinieron abajo en el juego ofensivo, permitiendo a sus rivales anotar veintidós puntos sin respuesta, dejando así un marcador de 34 – 10.
A pesar de los resultados, los dividendos para las Serpientes fueron positivos puesto que se cumplieron las expectativas de lograr experiencia a nivel deportivo, y de esta forma el equipo nacional seguirá trabajando para ganarse un lugar en la vitrina máxima del rugby sevens mundial.
