“EL OTRO ESTADIO AZTECA”
Por Arturo “Clutch” Couoh Amador
Lo que alguna vez fue el Coloso del Valle de la Misión; o bien, el escenario al que algunos animadores radiofónicos de béisbol llamaron el «Majestuoso» es tan sólo un recuerdo.
Entre las innumerables memorias destaca el mural del comedor del palco de prensa, cercano a la cocina. En él se encontraban algunas imágenes elaboradas por un diseñador en todos azul, amarillo y esmeralda.
El mural recreaba momentos especiales en la historia del estadio, principalmente alusivos al equipos de los Padres y de los Chargers, cuando éstos jugaban en San Diego. Dibujos de jugadores en plena acción y, sobre todo, de algunos periodistas como Tom Krasovic; locutores como Bob Chandler, y narradores como Jerry Coleman.
No recuerdo si estaba Ted Leitner, la inconfundible voz de los Padres, los Chargers y de los Aztecs tanto en fútbol americano como en baloncesto. El área de comida del palco se convertía en una atractiva galería. Cuando jugaban los Padres, eran colocadas las portadas de varios periódicos como el Union Tribune y el North County Times, ahora fusionado con el primero.
Inclusive recuerdo algunos ejemplares de El Mexicano con notas de Marcelo Martínez; el Esto de las Californias, con material de Jesús Whitney; el entonces recién nacido Frontera y su hermano mayor, La Crónica, con entrevistas de Abraham Nudelstejer, «Pachi» Coronado e Irasema Mayoral.
También, si mal no recuerdo, había algunos ejemplares de La Voz de la Frontera, de Mexicali, y otras portadas de revistas como Baseball America, los suplementos del USA Today, y de la desaparecida The Sporting News.
Entre ellas destaca una portada, hoy histórica y de gran valor simbólico, pues en la foto principal aparecían Tony Gwynn y Stan Musial en un reportaje dedicado al icónico rey del hit que en sus épocas de prospecto estuvo hasta en la mira de los equipos de la NBA, e inclusive llegó a ser selección de draft en la disciplina ráfaga, ya que Gwynn jugó baloncesto y béisbol como parte de los Aztecs en la NCAA.
El «Q» o Jack Murphy llegó a ser inspiración para la creación otros escenarios como el llamado «Palacio Sultán» de Monterrey, cuyo diseño guarda mucha similitud con el inmueble del Valle de la Misión antes de la modificación que este último sufrió previo al Super Bowl que se jugó en 1998, pues se elevaron los niveles de tribunas en la cabecera que en algún momento correspondía al área de los jardines, por donde se encontraba la pantalla gigante.
A propósito de Canadá, el Tri y Mission Valley
En el 2000 se celebró la Copa Oro de Concacaf. San Diego fue una de las sedes. En ella, México también sufrió un descalabro en contra de Canadá en cuartos de final. Los canadienses se proclamaron campeones bajo el mando de Holger Osieck, quien parecía llevarlos a dar el siguiente paso.
Creíamos que los canadienses sí calificarían al mundial de Corea-Japón 2002, pero con todo y Osieck se quedaron en el camino. Ahora, vuelven a estar muy cerca luego del triunfo en Edmonton. Con el «Tata» se vive un Deja Vu, similar a lo sucedido con Argentina que perdió finales contra Chile en su máximo certamen continental.
Los canadienses no han calificado a un mundial desde 1986 cuando Paul Lenarduzzi era jugador en aquella selección que participó en México. Siete años después, Lenarduzzi estuvo cerca de meter a los de la hoja de maple a un mundial, y de hecho también le metió un susto a México en el Varsity Stadium de Toronto cuando Alex Bunbury anotó el primer gol en el juego eliminatorio.
Después llegaron los goles de Hugo Sánchez, del «Abuelo» Cruz y el chauvinístico grito de Raúl Orvañanos en televisión nacional del que dicen, fue editado posteriormente (cuenta una leyenda urbana).
Los canadienses quedaron en el camino. Estados Unidos ya estaba calificado por su cuestión de local en el mundial. Las plazas para Concacaf eran limitadas en aquel entonces. Para Jack Warner y Chuck Blazer el manejo del organismo era más un coto de poder que una misión de desarrollo.
Si John Herdmann logra el boleto, podría superar como entrenador a Lenarduzzi y Osieck con una selección que luce mucho muy superior a la de los 80 y 90 en la era de Lenarduzzi como jugador y después como timonel.
Del Murphy al Nuevo Aztlán
Tras el derrumbe de la estructura del viejo Jack Murphy, ha comenzado una nueva era con la edificación del estadio universitario de San Diego State, al que inclusive han denominado en inglés «Aztec Stadium».
No sabemos realmente si este será el nombre definitivo. Lo más probable es que alguna empresa haga una «puja» por los derechos, lo cual servirá para el soporte financiero de los programas institucionales y deportivos de la Universidad de la que han egresado atletas destacados como el propio Gwynn o Marshall Faulk.
Además, de San Diego State han surgido otras figuras de la NFL que después emigraron a la industria del entretenimiento, la actuación, el análisis televisivo y la comedia, como Fred Dryer o Benny Ricardo.
Es muy probable que esta renovación le dé un nuevo impulso al área de San Diego, que se vio afectada por la partida de los Chargers a Los Ángeles, y desde luego, la Pandemia, que paró durante más de un año, una gran parte de las actividades.
Al mismo tiempo, la inauguración del nuevo estadio servirá de motivación para los aficionados, no aficionados, alumnos, planta docente y egresados, por la buena racha que experimenta en la actual temporada colegial el equipo de los Aztecs , que por ahora juega en Carson.
El hecho de tener roce con equipos y universidades de otras conferencias como la Pac 12, por ejemplo, ha servido para que el programa eleve su nivel y rendimiento, en una región dominada por escuelas como UCLA, USC, CAL (Berkeley) o los planteles del Pacífico Noroeste.
Desarrollo en potencia
El deporte de Baja California sumó otro premio nacional del deporte en los últimos ocho años con Aremi Fuentes y José Manuel Zayas. Ambos también ganaron el galardón estatal en la ceremonia que recientemente tuvo lugar en el Cetys y que estuvo conducida por nuestro amigo Guillermo Valero, Sr. dándole un toque especial en calidad de maestro de ceremonias, lo cual no es un oficio nada fácil de desempeñar.
La estadística de atletas y entrenadores del programa de Baja es interesante en cuanto a resultados en alto nivel de competencia y reconocimientos nacionales. De 2013 para acá tenemos a Daniel Corral y Oscar Aguirre, Natalia Botello, Carlos Bernaldez, Alexa Moreno, la propia Aremi y a José Zayas.
En otros estados también hay indicadores trascendentes que deben considerarse bajo momentos críticos como el actual en el que el presupuesto deportivo federal no es tan alto.
Jalisco, por ejemplo, será la entidad que más atletas juveniles aportará a la delegación mexicana que competirá en los Panamericanos Juveniles de Cali-Valle en Colombia de acuerdo con lo expuesto por el titular del CODE en aquella entidad, Fernando Ortega.
En tierras tapatías están de plácemes por la realización de eventos internacionales como ha sido el caso del torneo de tenis de la WTA celebrado en Guadalajara como una estrategia de aprovechamiento de las instalaciones del complejo panamericano empleado en los Juegos de 2011.
Este también es un ejemplo del uso de la infraestructura no de manera momentánea, sino como polo de desarrollo permanente, algo que en Colombia y Perú se buscó después de los Centroamericanos de Barranquilla y los Panamericanos de Lima.
Desafortunadamente, se dejó venir la pandemia y todo quedó en ese momento en «stand by». Sin embargo, parece que el sol sale de nuevo para poner la bola en juego.
