Beisbol: ¿ética y moral?
• Falleció en Mérida Jorge C. Menéndez Torres
• Excelentes entradas en la LNM: Dr. Carranza
· Cuba retornará en el 2014 a la Serie del Caribe http://espndeportes.espn.go.com/news/story?id=1823875&s=bei&type=story
Por Jesús Alberto Rubio.
El gran colega, Luis Eloy Ramírez Cabrera, desde Venezuela aborda una temática neurálgica y vigente:
Se agradece la colaboración, claro:
“Saludos a ti y la hermandad de Al Bat. Estaba algo alejado pero todos los días leyendo la columna, y es a propósito de la nueva novela de los esteroides – lucha que nunca comienza- y la MLB, que decidí dar mi aporte.
Es bastante largo, pero te aseguro nada tedioso pues por primera vez entiendo que no es su uso y sus daños como bien ha explicado el Dr. Carlos Rodríguez Candila.
La verdadera enfermedad-problema, está ante nuestros ojos su causa y origen: la avaricia, estimulada por Selig, el Sindicato y los dueños, por supuesto, pero hoy son los esteroides mañana las apuestas el mejor estilo de calcio ¿y luego qué?
Respecto a mi aporte cierto que no lo escribí como articulo deportivo, reconozco que me salí del formato de AL BAT, pero lo hice más como un llamado a la reflexión pues noto con preocupación que no lo sólo en ESPN sino en MLB en general esa conducta tolerante, hasta cómplice de comunicadores que parecieran de dar como niños ingenuos a los infractores.
Yo me tomo mucho a pecho a esto porque en Venezuela ha conocido casos de muchachos que creen que siendo más fuertes llegaran a las Mayores y aceleran el proceso, daño social y mental irreparable si no tienen éxito.
Un abrazo a la distancia para ti y la hermandad
¿Y quién enseña lo ético y lo moral a los peloteros?
Siempre acentúo -y lo hago hasta el cansancio- el valor que tiene esta ventana que permite a la hermandad, de manera democrática argumentar nuestras opiniones y contraponerlas a otras de las que discrepamos, todo gracias a nuestro apreciado Jesús Alberto lo permite y para muestra un botón.
En días recientes el amigo Víctor Soto de la bella Quisqueya escribió: “Los últimos escándalos sobre el uso de sustancias está socavando el mejor de los deportes para el desarrollo de los jóvenes, y si los modelos de estos jóvenes que son esas megas estrellas siguen saliendo en las primeras planas de los periódicos esas acciones podrían decepcionar a muchos que creen en esta disciplina”.
Lo interesante es que Víctor se da asimismo la solución para que eso no suceda cuando dice:” Los que nos dedicamos a enseñar este deporte, debemos inculcar verdaderos valores a los practicantes para que las acciones de los que ya llegaron no afecten su comportamiento en el futuro… Si a valores verdaderos; no a valores depredadores”.
La idea de que el beisbol del siglo XXI es sólo deporte es en mi opinión personal, fanatismo, con toda la carga semántica que la palabra deriva. Nosotros los opinadores- de oficio o aficionados- debemos ser más conscientes de esta realidad: El beisbol es un inmenso negocio y como tal sucumbe ante la tiranía económica.
El asunto no es sacar con pinzas, nombres salpicados con el uso de sustancias prohibidas; el problema apunta más allá como ¿quién enseña ética y moral a un pelotero?
Ya no sólo es infractor el jugador proveniente de las barriadas pobres de Latinoamérica; tampoco el “afro-descendiente” estadounidense. Ahora también aparecen nombres rutilantes de figuras “anglos” o blancos, esto para aquellos que gustan de victimizar por color de piel y origen.
Como en el mejor ejemplo de capitalismo del siglo XIX, en el juego de hoy priva MAMMON, el Dios dinero, la avaricia sin freno, de otra manera como se explica que multimillonarios como Alex Rodríguez, Roger Clemens o Barry Bonds se arriesguen a infringir una y otra vez.
Aquí no hay signos de interrogación, pues como mesa servida, los platos están con sus manjares a la vista. Cuando un hombre común – ustedes y yo- sabe que debe velar por su familia, su educación, salud, bienestar y vivienda, y logra todo eso con trabajo limpio y honrado, es un hombre ético y moral en una sociedad que espera y necesita de buenos ciudadanos.
Por otro lado, cuando un hombre deja de esforzarse pero logra superación no por sus propios medios, sino recurriendo a artificios y cosas ilícitas para amasar más dinero que las reservas internacionales de muchas naciones, allí aparece el caos, desaparece lo ético y lo moral; no es casualidad que día tras día aparezcan más titulares con peloteros involucrados en casos de adicción, ebriedad, violencia doméstica y callejera.
Que terrible será para el beisbol del futuro que los niños lo empiecen a jugar, con una meta única: ser millonario, cosa que sin duda serán. El asunto es ¿cuánto es para un pelotero ser millonario?
Jamás alguien en su sano juicio- excepto las personas muy espirituales- dirá que tener las comodidades, bienestar y seguridad que nos trae el dinero es malo; lo malo es la avaricia, aquello de que bastante plata no es suficiente.
La avaricia no es sólo amor al dinero, a las cosas materiales o la acumulación de ellas, es la perversión del tener y consumir descontrolado. La avaricia es en definitiva el motivo principal del porqué estos multimillonarios reinciden, por ello ya no bastan 100 millones.
Ahora ¡a esperar al jugador de 300 millones!
Es una carrera tipo Wall Street.
Hace algunos años una de las encuestas más grandes jamás conducidas en los Estados Unidos les preguntó a las personas; ¿Qué estarías dispuesto a hacer por 10 millones de dólares?
El 3% dijo que estaría dispuesto a poner a sus hijos en adopción, un 16% dijo que abandonaría a su cónyuge y el 25% dijo que abandonaría a su familia para siempre!
Ante esta realidad vienen a mi mente fotos de Dihigo, Torriente y Méndez con sus uniformes rotos, las de un Clemente golpeándose contra una pared de concreto o la anécdota de David Concepción cuando por ser el M.V.P del Juego de Estrellas de 1982, le dieron un televisor a colores, que por cierto aún guarda.
Yo no quiero peloteros pobres; si son millonarios, mejor aún pero con ética y moral, nunca esclavos de la avaricia.
¿Es tarde para las sanciones?
Quizá, a menos que sean ejemplares, algo harto difícil pues afecta los intereses del Sindicato, los dueños y la MLB, la cuarta pata de la mesa-fanáticos estafados pero leales- a llorar al sótano.
Pero volvamos al amigo Soto. No es que los niño sigan “mega estrellas” es que se les enseñe a jugar con ética y moral, he allí el dilema parafraseando al poeta… y por favor no tapemos el sol con un dedo al buscar excusas.
¡Excelente, Luis Eloy!
Carlos Castillo y Jorge Menéndez
El día de ayer y de manera repentina, falleció en Mérida el prestigiado columnista deportivo yucateco Jorge Carlos Menéndez Torre.
Colaboró en el Diario de Yucatán de 1960 a 1968. Enseguida fue jefe de la plana deportiva del Novedades de Yucatán y luego al diario Por Esto.
Firmaba sus columnas como «George Squeeze Play».
Fue vicepresidente de los «Leones» de Yucatán. Escribió los libros «Pisa y Corre» (1972), «Guía y Récords de los Leones de Yucatán» (1987-2001), «Juego de Estrellas Norte contra Sur» (1992), «En un Día como Hoy en el Beisbol Mexicano» (2008), «Dardos al Corazón» (1981), «De México a México» (1986, «Titanes Olímpicos» (1988) y «100 Años de Tenis en Yucatán».
También recibió el Premio Nacional Periodístico de la «Mejor crónica del Año» que le otorgó el Salón de la Fama del Beisbol Mexicano en los años 1985, 1995, 1996 y 1999. Dio cobertura a los Juegos Olímpicos de México en 1968.
Puedo agregarles que en 1981 me llamó para cubrir la temporada íntegra de los «Leones» o sea la crónica tanto en casa como en gira. Por lo que agradezco a Jorge tal distinción a mi trabajo. Su esposa Margarita Moguel Guzmán se adelantó en el viaje en el año de 1999. Le sobreviven sus hijos presbítero Jorge Carlos, Luis Humberto, José Antonio, Francisco Javier, Margarita María y Martha María.
Postulado como candidato al Salón de la Fama del Beisbol Mexicano, ya en dos ocasiones y esperamos que ahora se le de ingreso automático por su labor y será como en el caso del ya inmortal yucateco Jorge Blanco Martínez «George White», solo la desaparición física les permitirá su nominación.
Y como dice mi estimadísimo amigo cubano Félix Sautié Mederos, Jorge ha llegado ya «a la casa que no se termina de construir». Un abrazo Jorge Carlos y descansa en paz.
Dr. Vicente Arturo Carranza Fernández:
Mi Sangre: hace dos días en el estadio Gasmar de Tijuana, antes llamado “Cerro Colorado” entraron más de 12,000 aficionados en el encuentro de Ensenada contra Toros; abría que preguntarle a nuestro amigo Ariel González (Mercadotecnia) cómo le hacen para llevar en la LNM un promedio por juego en la temporada de aproximadamente 8,000 aficionados. ¿Qué te parece?
Anoche me confirmaron la invitación para que lance la primera bola en el juego inaugural de los play off, emocionante pues me remonto a que en 1977 en ese estadio y en su inauguración esa temporada fui el primer médico de la organización cuando jugaban los Potros de Tijuana.
Efemérides de Alfonso Araujo:
https://www.facebook.com/pages/BEISBOL-E-HISTORIA/244380305594711
