Los Pequeños Gigantes
* Naranjeros abrirá su XIV Campamento de Verano
* Tony Gwynn: un arte de bateo
Por Jesús Alberto Rubio.
Enhorabuena por el Club de Beisbol Naranjeros de Hermosillo por pensar y atender-formar a las nuevas generaciones a través de su ya tradicional Campamento de Verano que iniciará –en su XIV Edición– el próximo lunes 30 del mes en curso y el cual por vez primera se llevará a cabo en el flamante Estadio Sonora.
Lo interesante de estas clínicas de fomento y enseñanza de los fundamentos del béisbol, es que participan niños y niñas de 6 a 12 años de edad bajo la conducción de instructores profesionales, Blas Arredondo, César Cruz, Ramón Munguía y Alejandro Romero.
El programa formativo tendrá una duración de dos semanas, culminando el viernes 11 de julio y se realizará de 8:00 a 10:00 horas y tendrá un costo de inscripción de $250 pesos y con ella los participantes recibirán la camiseta y gorra del campamento.
Las inscripciones para estas clínicas se llevarán a cabo en las taquillas del Estadio «Héctor Espino» en horarios de 9 de la mañana a 7 de la tarde.
Magnífico, amigos.
Las inscripciones para estas clínicas se llevarán a cabo en las taquillas del Estadio «Héctor Espino» en horarios de 9 de la mañana a 7 de la tarde.
Gwynn y el arte de batear
Tony Gwynn fue uno de los mejores bateadores de la historia para promedio: En siete ocasiones bateó por encima de los .350.
Un bat por demás notable que se retiró después de la temporada de 2001. Él y Cal Ripken Jr., quien jugó toda su carrera para los Orioles de Baltimore, ingresaron al Salón de la Fama en 2007. Gwynn fue electo a Cooperstown con el 97.6% de los votos elegibles.
Vea la clase de porcentajes (los más altos de su carrera) que logró:
Por orden cronológico, vayamos al primero:
1984: .351
1987: .370
1989: .336
1993: .358
1994: .394
1995: .368
1996: .353
1997: .372
Su habilidad para poner la pelota en juego, hoy como que resulta un arte perdido. La máxima cantidad de veces que se ponchó en una temporada fue 40; los jugadores ahora se ponchan esa cantidad de veces en un mes.
Tony también jugó en el béisbol de Puerto Rico donde en igual demostró su talento bateador en dos temporadas: 1982 con Vaqueros de Bayamón y en 1984, Senadores de San Juan. En la primera campaña pegó .368/sublíder); y en la segunda, .327 (quinto).
Desde 1950, ningún otro bateador ha podido igualar el promedio de por vida de Gwynn de .338.
Mire los mejores promedios, precisamente desde 1950:
Gwynn: .338
Williams: .335
Wade Boggs: .328
Rod Carew: .328
Miguel Cabrera: .321
Stan Musial: .321
Durante 20 temporadas con los Padres de San Diego, su único equipo en las Grandes Ligas, Tony Gwynn creó como uno de los más temibles chocadores de bola.
“Mr. Padre” ganó ocho títulos de bateo, y terminó con 3 mil 141 imparables, séptimo en la lista de todos los tiempos, entre los peloteros que jugaron toda su carrera para un mismo equipo.
Poseía como pocos, una formidable coordinación de ojos y manos.
Pudo ir a otro club y ganar más dinero, pero desechó cuanta oferta recibió, porque quería entrañablemente a la afición de San Diego.
“Más que Mr. Padre, Tony era “Mr. San Diego”, dijo la organización de los Padres en un comunicado.
Pocos jugadores como Gwynn, un zurdo especialista en batear entre el hueco de tercera y short, dejaron estadísticas tan impresionantes.
El participó en 15 Juegos de Estrellas y dos series mundiales.
Hay mucho más de Gwynn, por supuesto.
Sin embargo, por hoy, desafortunadamente, ayer a sus 54 falleció en el suburbio Poway de San Diego.
Gwynn había sido sometido a dos operaciones para atender el cáncer en su mejilla derecha entre agosto de 2010 y febrero de 2012.
La segunda cirugía fue para remover un nervio facial que le presentó complicaciones debido a que éste se encontraba entrelazado con un tumor alojado dentro de la mejilla. Los médicos le hicieron un injerto con nervios del cuello para que eventualmente pudiera recuperar el movimiento facial.
El cáncer en su glándula salival fue consecuencia de su costumbre de masticar tabaco.
A Gwynn le diagnosticaron la enfermedad en 2009, cuando le retiraron un tumor maligno de su mejilla derecha. Sin embargo el cáncer regresó en dos ocasiones, y a finales de 2012 comenzó un tratamiento de radiación para intentar reducir el tumor.
En paz descanse.[simpleviewer gallery_id=»507″]